La Habana.- Los dos peloteros que intentaron quedarse en México hace dos días en pleno Campeonato Panamericano sub-23 regresaron este sábado a Cuba, deportados por las autoridades del país norteamericano.
El periodista especializado Francys Romero detalló en Twitter que Alfredo Fadraga y Yosvani Ávalos, quienes abandonaron la competencia en Aguascalientes, «ya se encuentran en Ciego de Ávila (oriente), lugar donde residen ambos, según fuentes cercanas».
Amnistía Internacional criticó la detención de ambos jugadores, tras la orden de captura hecha por la delegación oficial cubana.
La Federación Cubana de Béisbol (FCB) informó la víspera de que ambos «fueron tratados con absoluto respeto y consideración, sin olvidar jamás que se trata de alumnos del sistema de enseñanza deportiva cubano».
«Se indagó por su situación de salud, alimentaria y psicológica. Las direcciones de la delegación y de la FCB intercambiaron con ambos atletas de modo sincero y transparente», según la nota de prensa.
La propia federación caribeña informó hace dos días de la fuga de Fadraga y Ávalos, mientras culpó de ello a «la inhabilitación del acuerdo» que normalizaba la llegada de los jugadores cubanos a la Major League Baseball» (MLB).
Eso «sigue constituyendo un estímulo para los orquestadores de estas acciones de tráfico de atletas», consideró la entidad deportiva.
El año pasado se quedaron en México 12 de los 24 peloteros del equipo cubano Sub-23 que compitió en el Campeonato Mundial de béisbol en el estado mexicano de Sonora, recuerdan medios independientes.
Las Grandes Ligas y la FCB acordaron en 2018 permitirle a los cubanos jugar en Estados Unidos sin tener que desertar primero, pero el expresidente Donald Trump (2017-2021) lo descartó rápidamente.
Desde entonces, han habido varios casos de jugadores cubanos que han abandonado sus equipos para jugar en el país norteamericano.
